Pervaz, un territorio devastado por una larga guerra. Y el nuevo señor, Asha Perbaz, que tiene que hacerse cargo de él. Ella tuvo una audiencia con el emperador para recibir una recompensa por su victoria, pero la ridiculizaron como la “princesa salvaje” y su ridícula recompensa fue darle el derecho a elegir un cónyuge. Asha tuvo que tomar la mejor decisión incluso en esta situación. “Entonces… que sea el duque de Carlisle Haven”.